El PJEdomex tiene el reto de interpretar los tiempos
En política, hay principios que trascienden coyunturas: el poder tiene su lógica, y los tiempos del cambio suelen ser implacables con quienes no saben leerlos. A pesar de la nueva configuración política mexiquense, la elección del próximo presidente del Poder Judicial del Estado de México (PJEM) se define en dos espacios cruciales: el pleno de magistrados y, de manera no menos significativa, la opinión de Lerdo 300.
En este contexto, el grupo del presidente saliente enfrenta una realidad inevitable: no tiene margen para imponer a su sucesor ni para influir en el rumbo de la reforma judicial.