PJEdomex en los últimos años ha hecho un gran esfuerzo para mejorar – José Elías Nader
Desde jovencito sabía que quería estudiar la carrera de Derecho, pues siempre he sido un convencido de que para construir un México mejor, necesitamos vivir con justicia y equidad, por ello es que el estudio jurídico a lo largo de cinco años de carrera fue algo apasionante, sin embargo, una vez saliendo de la universidad quedé decepcionado cuando acudí a los juzgados donde si no era con una “mordida”, el caso no avanzaba, parte de una corrupción que durante décadas ha condenado a la justicia de nuestro país ocasionando graves atrasos.
El Poder Judicial de la federación y del Estado de México viven tiempos de una transformación mayúscula, pues más allá de los debates sobre si es buena o mala, la reforma judicial es una realidad a la que autoridades y sociedad se deben ajustar, esperando que se traduzca en una justicia más eficiente, humana, profesional y honesta.
De esta forma, ayer la Legislatura mexiquense aprobó la reforma judicial para la entidad con 54 a favor y 20 en contra, avalando de esta manera la elección de magistrados, jueces y ministros a través de voto directo, además de que se creará un Tribunal de Disciplina y un Órgano de Administración Judicial, para supervisar y sancionar a jueces, el cual sustituirá al Consejo de la Judicatura del Estado de México, entre otros cambios importantes.
Por lo pronto, el próximo 1º de junio se llevará a cabo este proceso, que electoralmente representará un reto enorme por el número de magistrados y jueces a elegir, una decisión que debe ser tomada con mucha responsabilidad, pues en sus manos estará la justicia que nos ayudará a evolucionar como entidad o que condene nuestro camino.
Como un apasionado de las leyes, de la justicia y la equidad, espero que está importante reforma sea para bien, que signifique una evolución para el Poder Judicial del Estado de México que en los últimos años ha hecho un gran esfuerzo para mejorar y así podamos contar con mayor honestidad, conocimiento y humanismo al momento de decidir sobre algo tan preciado como lo puede ser la libertad de una persona inocente o en su defecto, de un culpable que puede quedar impune